Description

El Arco de Trajano es una obra de arte única. Símbolo de Benevento, representa un testimonio bien conservado de la civilización romana. La fecha de su construcción es el año 114 d.C. Se construyó para celebrar la figura del emperador Trajano con motivo de la inauguración de la Via Appia, una carretera que conectaba Roma con Brindisi. Debido a su grandeza, a lo largo de los siglos se le llamó "Porta Aurea". Y Trajano es recordado como "Optimus", un príncipe ilustrado cuya fama ha permanecido intacta hasta nuestros días. El propio Dante lo colocó en el Paraíso como prueba de una grandeza indiscutible. El arco consiste en una única arcada de 15,60 m de altura y 8,60 m de ancho. En cada fachada encontramos cuatro semicolumnas, dispuestas en las esquinas de los pilares, que sostienen un entablamento. Más allá de los arquitrabes hay un ático, que sobresale en la parte central por encima del arco, y que tiene un espacio interior cubierto por una bóveda de cañón. Está construida con bloques de piedra caliza, revestidos con opus quadratum en bloques de mármol de Parián. La rica decoración escultórica muestra temas diferentes en cada fachada: la interior, que mira a la ciudad y a los ciudadanos, aborda la paz y la providencia, mientras que la exterior, que mira a las provincias, se refiere a la guerra y a las providencias del emperador. El ático tiene una inscripción central dedicatoria y dos paneles en bajorrelieve: el exterior contenía dos representaciones, la de la izquierda era un homenaje a las Deidades agrarias mientras que la de la derecha la Deducción de las Colonias Provinciales. El panel de la cara interior contenía también dos representaciones, que mostraban a Trajano acogido por la Tríada Capitolina, a la izquierda, y a Trajano en el Foro Boario, a la derecha. El friso del entablamento representa la procesión del triunfo de Trajano sobre Dacia, en muy alto relieve. En cada pilón, otros dos paneles, colocados uno encima del otro, siguen representando escenas y alegorías de las actividades imperiales. Los paneles están divididos por relieves decorativos inferiores con representaciones de las victorias taurototonianas en el centro y de las amazonas en la parte superior. Las enjutas del arco de la arcada representan personificaciones del Danubio y la Mesopotamia en el lado exterior y la Victoria y la Fidelidad Militar en el lado interior, acompañadas por los Genios de las Cuatro Estaciones. En las claves del arco hay otras representaciones: Fortuna en el lado exterior y Roma en el interior. Los lados interiores del arco presentan dos grandes paneles esculpidos que representan escenas de las actividades de Trajano en la ciudad. A la izquierda se encuentra el Sacrificio para la inauguración de la Vía Traiana, mientras que a la derecha está esculpida la institución de la Alimentaria (institución benéfica iniciada por Trajano para ayudar a los niños de la Italia romana) simbolizada por los panes en la mesa del centro. Por último, en la bóveda, decorada con casetones, aparece la representación del Emperador coronado por una Victoria. Arechi I, inmediatamente después de la conquista lombarda, en el siglo VI d.C., lo incorporó a las nuevas murallas de la ciudad, convirtiéndolo en una puerta de la misma. Esta nueva función garantizaba su uso y, por tanto, su conservación en el tiempo. Sin sufrir ni siquiera el terrible terremoto de 1688, que destruyó muchos de los monumentos de Benevento, el arco sigue figurando en la documentación cartográfica más antigua como completamente incorporado a las murallas de la ciudad. La primera intervención concreta de aislamiento tuvo lugar con el pontificado de Pío IX en 1854. A finales del siglo XIX, el ático fue demolido y las piezas que faltaban de la cornisa fueron sustituidas por nuevas formas de travertino. Más tarde, fotos de la Segunda Guerra Mundial muestran un arco completamente cubierto con sacos de arena, sostenido por estructuras de madera para protegerlo de los bombardeos. En 1975, la Soprintendenza ai Monuments de Campania realizó una intervención para la consolidación estática y la restauración conservadora del arco. Tras el terremoto de 1980, y basándose en las inspecciones, se decidió que se debía proceder a la restauración de todo el monumento con carácter de urgencia debido a la repetida caída de fragmentos. Los trabajos, realizados en varias etapas, culminaron en 1999 con el montaje de un andamiaje especial para poder seguir de cerca la restauración y, sobre todo, admirar los relieves que constituyen una síntesis iconográfica de los más de diez años de gobierno y acciones militares del emperador. Hoy en día, el observador que llega a Benevento por primera vez y se encuentra con esta obra, símbolo de la aventura de un emperador, Trajano, y de una ciudad, Roma, no puede evitar sumergirse en una atmósfera mágica en la que el desafío con la eternidad encuentra su concreción. (Tomado de la página web del Ayuntamiento de Benevento por Chiara Maria Pontillo )