La catedral de Santa Ana, también conocida como catedral de Belfast, es una gran iglesia anglicana situada en el centro de Belfast (Irlanda del Norte). Construida en 1899, la catedral es uno de los ejemplos más importantes de arquitectura gótica de Irlanda del Norte.La catedral fue diseñada por el arquitecto Thomas Drew, que se inspiró en el gótico francés para su diseño. La fachada de la catedral presenta un gran rosetón flanqueado por dos campanarios, mientras que el interior presenta un gran techo abovedado decorado con esculturas de ángeles y animales fantásticos.La catedral de Santa Ana también alberga un gran órgano, construido por la famosa empresa alemana de órganos Klais. El órgano consta de más de 4.700 tubos eléctricos y mecánicos y se utiliza regularmente para conciertos y actuaciones musicales.La historia de la catedral está estrechamente ligada a la de Belfast. Durante la Segunda Guerra Mundial, la catedral sufrió graves daños a causa de los bombardeos aéreos, pero más tarde fue restaurada y reabierta al público.Además de su importancia histórica y arquitectónica, la catedral de Santa Ana es también un importante centro religioso y cultural. La catedral acoge regularmente conciertos, representaciones teatrales y exposiciones de arte, y está abierta al público para visitas guiadas gratuitas.Además, la catedral también tiene una fuerte conexión con la cultura irlandesa, ya que ha acogido conciertos de importantes artistas irlandeses como Van Morrison y Bono de U2. La catedral de Santa Ana es, por tanto, una de las principales atracciones culturales de Belfast y un testimonio de la riqueza histórica y cultural de la ciudad.