Una auténtica joya situada entre los acantilados de los Alpes Apuanos, en el Parque de los Alpes Apuanos, a pocos kilómetros de Castelnuovo di Garfagnana, en la carretera que une la capital de esta pequeña y verde región del norte de la Toscana con la Versilia. Tanto el pueblo como la orilla del lago se pueden alcanzar a pie por el camino pavimentado que desciende desde la carretera principal hasta el lago. Esta aldea, antaño abandonada, ha sido restaurada en parte en los últimos años y, aunque conserva un aspecto muy rústico, se ha transformado en un albergo diffuso. Isola Santa está adornada por una antigua iglesia dedicada a San Jacopo, mencionada en 1260 y ahora desconsagrada. El pueblo se asoma a un lago artificial, llenado por las aguas del torrente Turrite Secca detenido por una presa en 1948-49 (para uso de la cercana central hidroeléctrica), que sumergió en parte el antiguo pueblo. Cada diez años, el vaciado de la cuenca hace resurgir los edificios semidestruidos del pueblo, en particular un molino y un pequeño puente de piedra. Las excavaciones realizadas por la Universidad de Pisa entre 1976 y 1977 permitieron descubrir importantes datos arqueológicos que atestiguan la presencia de un asentamiento al aire libre ocupado durante mucho tiempo por grupos de la fase final del Paleolítico y luego del Mesolítico, que acamparon aquí varias veces. Para llegar fácilmente con su vehículo al mejor punto de observación del lago y del característico pueblo, desde donde también se pueden tomar sugestivas fotos, recomendamos, tanto viniendo de Castelnuovo como de Versilia, salir de la carretera estatal siguiendo las indicaciones de Capanne di Careggine, a lo largo de via Monti Mare (3/4 minutos) para llegar a Ceragetta Resort y luego, después de 800 metros, aparcar en la gran área privada del restaurante del complejo, concretamente en via Ceragetta, 5.