El complejo monumental del Sacro Monte es parte integrante de la Reserva Natural Especial, establecida en 1980 por la Región de Piamonte, y se eleva a 608 metros sobre el nivel del mar, en una colina rocosa que domina Varallo y ofrece unas vistas muy sugerentes no sólo de la ciudad, sino de toda Valsesia. Al Sacro Monte se puede llegar a pie, siguiendo un recorrido ascendente de veinte minutos que comienza en el centro de Varallo y que representa idealmente la ruta de la subida de Jesús al Calvario; en coche desde la carretera de carruajes de la aldea de Crosa di Varallo, o en funicular, reabierto en 2003 tras las obras de renovación. Es la más antigua de las montañas sagradas italianas, creada en 1491 por Bernardino Caimi, y ha sido un modelo para otros complejos que han surgido posteriormente a lo largo del arco alpino. El monje franciscano, de vuelta de un viaje a Palestina, decidió reproducir esos lugares en Varallo y evocar la Vida y la Pasión de Cristo. Así se creó una "Nueva Jerusalén" en el corazón de Valsesia para beneficio de los fieles que no podían viajar a Tierra Santa, que entonces estaba bajo dominio turco. Los peregrinos podían así revivir los acontecimientos del Evangelio en el "gran teatro de la montaña" con asombro y emoción. La representación sagrada tiene lugar en 45 capillas, aisladas o insertadas en arquitecturas más articuladas, y está escenificada por 800 estatuas de madera y terracota policromada de tamaño natural y más de 4000 figuras pintadas al fresco. El itinerario entre las capillas se divide en dos partes distintas: la primera desde la capilla nº 1 (Adán y Eva) hasta la nº 19 (la entrada de Cristo en Jerusalén). La primera, desde la capilla nº 1 (Adán y Eva) hasta la nº 19 (Entrada de Cristo en Jerusalén), ocupa la zona más inaccesible del parque y está completamente inmersa en el verdor de la Reserva; la segunda abarca la cima del Monte, a la que se accede por la Puerta Dorada, y está organizada como una ciudad: palacios, pórticos, plazas del Templo y de la Corte, capillas que relatan los episodios de la vida de Cristo que tuvieron lugar dentro de las murallas de Jerusalén (Última Cena, Sepulcro, Resurrección, Asunción de María). La Basílica de la Asunción, en el centro del complejo sagrado, es el punto de llegada ideal del peregrino. Cada capilla representa un episodio de la vida o la Pasión de Jesús: Se han creado complejas escenografías con frescos y grupos de estatuas de madera o de terracota pintada, de tamaño natural y de fuerte poder expresivo, completamente similares a las figuras humanas, con barbas y cabellos reales. En ella trabajaron notables artistas, no sólo locales; entre ellos destaca la figura de Gaudenzio Ferrari (1471/75 - 1546), pintor, escultor y arquitecto valsesiano que trabajó en la obra desde 1499, año de la muerte de su padre fundador Caimi, hasta 1529, cuando se trasladó a Vercelli. Diseñó y realizó las escenas de la Natividad, la Llegada de los Reyes Magos, la Crucifixión y la Piedad. Después de él, trabajaron en la obra valesana Lanino, Luini, el arquitecto Galeazzo Alessi, los escultores Tabacchetti y Giovanni d'Errico y los pintores Morazzone, Tanzio, Rocca, Gherardini y Gianoli, que participaron en la renovación del conjunto desde mediados del siglo XVI. La basílica, dedicada a la Virgen, fue construida a partir de 1814, con la fachada de Giovanni Cerutti y el altar mayor de Benedetto Alfieri. Visitando el Sacro Monte se puede iniciar un viaje personal de ascensión, partiendo de la capilla de Adán y Eva y pasando por la Anunciación y los episodios de la vida de Cristo, para culminar con el alto dramatismo de la Pasión, expresado en los diversos episodios que relatan las últimas horas de Cristo en la tierra hasta la Resurrección. La visita concluye con el Sepulcro de la Virgen. Desde 2003, el Sacro Monte di Varallo está incluido en la lista de sitios del Patrimonio Mundial de la UNESCO.